jeudi 11 mars 2010

05/12/2005, nuestro día "D"

Ya un mes antes de viajar habíamos dejado de trabajar completamente y nos habíamos avocado de lleno a nuestro viajecito. Vendimos todos los muebles y casi todas nuestras pertenencias, y compramos 10 bolsos bien grandes que llenamos con 35 kgs cada uno.

En esos bolsos traíamos "todo" lo que queríamos traer, ya que no habría nada "a venir". Aquí les hago una recomendación constructiva (casi un "pedido desgarrador") a las señoras novias/esposas: si pueden evitarlo, dejen TODO lo que es reemplazable y/o no importante, léase artículos de cocina, decoraciones, muebles, electrodomésticos, todo lo que ocupe espacio y pese, y lo puedan comprar acá sin problema.

Nosotros, que cumplimos mas o menos con esta regla, terminamos trayendo la batería de cocina que podíamos haber comprado acá y decoraciones que mas tarde no utilizaríamos, entre otras cosas.

Pués bien, el 05/12/2005 llegó mi amigo Marcelo a buscarnos a casa con su auto y el taxi (camioneta) que contraté para llevar los bolsos (350kgs en diez bolsos, mis amigos!)

Llegamos al aeropuerto de Ezeiza (Buenos Aires), plastificacmos los bolsos, despachamos el equipaje, pagué el sobrepeso y me enteré de que de yapa iba a visitar Santiago de Chile, ya que agregaron esa escala en mi viaje, sin preguntar ni avisar por supuesto.

El muchacho en Air Canadá se portó de 10, algunas valijas tenían sobrepeso y otras no, así que las paso todas juntas que en promedio estaban correctas. Hubiera sido un dolor de cabeza empezar a abrir los bolsos para arreglar los pesos. Empezaba la travesía...



Llegados a Santiago de Chile, nos hicieron bajar del avion durante unas 2 horas, con el equipaje de mano (que también, teníamos demasiado!) para volver a subir al mismo avion. Tendrían que limpiarlo, supongo..

Partimos hacia Toronto, ví la cordillera de los Andes desde la ventana del avion (igual con el stress que tenía podría haber visto el Riachuelo desde el aire que me daba absolutamente lo mismo) y continuamos viaje. El avion no fue turbulento, pero el viaje se me hizo largo, un poco incómodo el avion (como todos los aviones del mundo en sección "gallinero") y no dormí casi nada. Al llegar a Toronto el 06/12/2005 estaba totalmente extenuado del stress y de no dormir. Terminé en el baño del avion mismo cuando aterrizabamos. Fuí el ultimo en bajar del avion.

Una vez en el aeropuerto de Toronto, que es in-men-zo, necesitabamos llamar por teléfono a unos conocidos que nos estarian recibiendo en Québec para avisarles que todo iba segun lo planeado. Para ello necesitabamos monedas, con lo cuál me acerqué a uno de los "azafatos" que hablaba español, el cual sacó 25 centavos de su billetera y me los regaló. Lo miré con cara de agradecimiento, a lo que respondió "No es nada..son solo 25 centavos". Para mi eran una demostración de generosidad de su parte.

Llegamos a las cabinas de inmigración, y al ser residentes permanentes recién llegados, teníamos que hacer un paso adisional para obtener nuestro documento de entrada oficial a Canadá. Nos hicieron pasar a un sector especial de aduanas, donde por suerte no había casi nadie. Nos llamó una de las empleadas a pasar a uno de los mostradores para completar nuestra entrada en Canadá. Al lado nuestro en el mostrador contíguo había un señor de unos 55 años de Brasil, a quien consideraban sospechoso ya que no tenía voleto de retorno comprado. La señora que le explicaba el rechazo era bien enérgica y terminante, y siendo que el hombre no hablaba Inglés, la mujer llamó a una de sus colegas para que le tradujera, con lo cuál era un cuadro Dantesco, la mujer encabronada casi gritando al Brasilero en Inglés, y su colega traduciendo con los mismos gritos en Portugués. Yo, al borde del desfallecimiento, trataba de concentrarme en lo que me hablaba la señora que nos atendía que tendría unos 40 años, cara de muñequita, y cuerpo de Rambo, vestida con uniforme de policía, pero muy simpática.

Al ver nuestra foto en el documento de inmigración nos explicó que el fondo no era lo suficientemente blanco, con lo cuál la foto no servía. "Qué hago ahora..!!??" me pregunté para mis adentros. Por supuesto esperaba el comentario bien latino: "Ahora no va a poder completar su trámite, porque esa foto es esencial", terminaría peleándome con la empleada y probablemente cumpliendo tiempo en Guantánamo.

Pero no, nada de eso. "Le vamos a sacar una foto aquí mismo nosotros" me dijo la mujer esbosando una sonrisa encantadora. Pasamos a otra sala, nos tomaron las fotos, y volvimos al mostrador con la señora. "Cuanto le debo?" pregunté, mientras sacaba la billetera. "Nada, señor" me contestó la señora, casi ofendida.

Nos fuimos del mostrador hacia donde entregan los bolsos, máquinas giratorias gigantes, y por supuesto mis bolsos eran los únicos que quedaban dando vueltitas, con lo cuál me busqué un carro y empezamos a cargar. El problema es que se necesitan 3 carros como mínimo para cargar 10 bolsos, y nosotros eramos solo 2.

Una señora empleada del aeropuerto nos indicaba que no nos podíamos quedar ahí, a lo cual la miré con cara de vaca mirando la ruta ya que no podía yo solo cargar los 350kg y salir corriendo de ahí. A lo lejos veo venir a un muchacho de una empresa de servicio de carga de carros a paso ágil, que se nos acercó y nos ofreció ayudarnos. Nos salvamos!

Nos preguntó cual era nuestro próximo destino, y ahí nomas encaró hacia el hangar de partida hacia Québec. Llegamos para hacer aduanas con los bolsos. No había mucha gente, pero les estaban haciendo revolver todos los bolsos a dos chicas, así que otra vez me preparé para lo pero: sacar TODO de 10 bolsos plastificados rellenados a presión. Nos recibió un muchacho joven muy agradable, me preguntó el contenido de los bolsos (saqué inmediatamente mi "declaración de bienes a importar" ya preparadita de antemanos, describiendo el contenido y el valor), a lo que el muchacho me preguntó cuantos muebles vendrían mas tarde. Le respondí que nada, que esto era todo, y le pregunté con risita nerviosa "No le parece que es suficiente..?". Me dijo, para sacar conversación, que él hablaba español,"ah, sí?" dije con cara de interesado. Sí, un "piquito" me respondió, a lo cuál le festejé el chiste como un nabo. Sus palabras siguientes fueron unas de la más bellas que he escuchado en toda mi vida: "Alright, welcome to Canada".

Seguimos viaje con el muchacho carga-maletas, pagué su tarifa (12$) el la oficinita de su compañia y le dí 5$ de propina, a lo cual me sonrió como si le hubiera dado un millón de dólares. Continuamos hacia el hangar de partida, metimos los bolsos en otra cinta transportadora, y nos pusimos en la cola para abordar el avion. Aquí sí nos revisaro el equipaje y nos preguntaron de todo, me hicieron abrir un disco rígido externo, cremas, etc. Todo bien, continuamos...

Llegamos ahora al pequeño avion que nos llevaría hasta Québec. Hacía frío, y para llegar al avion había que caminar literalmente por una pista de aterrizaje. Subí al avion y me desmayé del cansancio.

Una hora mas tarde abrí los ojos y ví desde el aire Montréal y 30 minutos después la Ville de Québec.

Llegamos, nos estaban esperando nuestros conocidos por aquí, y tomamos nuevamente 2 taxis para que entraran todos los bolsos. Llegados a la casa subimos los bolsos uno a uno los 3 pisos por escalera, y me tiré, ya liquidado, en un sillón.

Aquí les dejo algo muy divertido: los Tête-a-claque, una invensión Quebecoise.

5 commentaires:

  1. Parto a Calgary dentro de un mes, tu relato me provocó un hueco en el estómago. Muy bueno¡¡¡ Lograste transmitir todo el nerviosismo, ansiedad, emoción, cansancio, alegría, etc. en solo un post. Genial¡¡ (tengo miedo¡¡¡¡)
    Gracias por compartirlo =)
    Sandra

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  2. Pero no, Sandra! A no tener miedo!
    Justamente el relato es para mostrar como me hice nervios para nada, y que todo fué perfectamente bien.
    No conozco Calgary, pero tengo entendido que es muy muy lindo. Algún día pasaré seguramente por allá!
    La mejor de las suertes, y tenenos al tanto de tu travesía.
    Saludos
    Jordan

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  3. Pues hubieras aclarado la intención desde el principio y no me hacías sufrir gratuitamente =)
    Sandra

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  4. Si, perdón, es mi humor a veces un poco sarcástico, lo reconozco. Peroen serio que todo te va a salir bien. Prometido!!
    Saludos

    Jordan

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  5. mi nombre es fajar. Vivo en Bedono en Java Central. Estaba en un problema financiero muy crónico y una situación de salud terminal hace unas semanas. Después de que toda mi búsqueda de ayuda de amigos y vecinos resultó fallida, siento que no hay nadie a quien realmente le importe. Me cansé mucho debido a la falta de fondos para expandir mi negocio y mis 2 hijos de 5 y 8 años tampoco eran guapos debido a la falta de atención adecuada como resultado de las finanzas. Una mañana fiel vi a un viejo amigo de mi difunto esposo y le conté todo lo que había estado pasando y él dijo que la única forma en que podía ayudarme era dirigirme a un buen oficial de préstamos en EE. UU. que también lo ayudó, explicó. para mí sobre cómo estaba financieramente deprimido y cómo fue impulsado por este oficial de préstamos (el Sr.Pedro, quien le otorgó un préstamo de 7,000,000.00 USD a una tasa asequible de 2) .Me aseguró además que eran la única firma de préstamos legítima que encontró en línea. me dio su correo electrónico y así fue como solicité y también me concedieron un préstamo y mi vida cambió para siempre.contacte al único prestamista genuino, el señor pedro, por correo electrónico: pedroloanss@gmail.com para resolver su problema financiero.

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